Enfoque
Introducción
En los inicios del siglo XIX, la llamada “querella calderoniana” (1814-1820) supuso un hito en el surgimiento del Romanticismo español. En efecto el enfrentamiento entre intelectuales conservadores (Böhl de Faber) y liberales (Mora o Alcalá Galiano) a propósito del valor del teatro de Calderón de la Barca como representación del espíritu hispánico trascendió pronto los aspectos puramente literarios para convertirse en una polémica política en la que se contraponían dos visiones de España: la conservadora y la liberal.
En este ambiente literario crispado, Ángel de Saavedra, Duque de Rivas, uno de los máximos representantes del Romanticismo en su vertiente liberal o radical, acomete una reescritura “a lo romántico” de la obra más universal de Calderón, La vida es sueño, a fin de exaltar los aspectos más progresistas del texto clásico.
Objetivo
Nuestra investigación aborda un análisis comparado entre La vida es sueño de Calderón de la Barca y El desengaño en un sueño del Duque de Rivas, tanto en sus aspectos temáticos y argumentales como estilísticos y técnicos. De este modo, tratamos de demostrar cómo la influencia de Calderón en el teatro romántico no se limitó a los textos teóricos y críticos, sino que alcanzó a la producción dramática de la época.
Metodología
Nuestro estudio se enmarca en el ámbito de los Estudios Literarios y la Literatura Comparada y, para llevarlo a cabo, hemos empleado una metodología inductiva. Asimismo, hemos sustentado nuestra investigación en bibliografía especializada sobre la producción dramática de Calderón de la Barca, de la obra del Duque de Rivas y acerca de la “querella calderoniana”.
Resultados y discusión
El desengaño en un sueño establece claros vínculos de intertextualidad con La vida es sueño, los cuales se explicitan al espectador ya desde el propio título del drama. De este modo, el Duque de Rivas crea un protagonista análogo al Segismundo calderoniano, también recluido por su padre, y aborda, desde una cosmovisión romántica, algunos de los temas fundamentales de La vida es sueño, como son la libertad, el enfrentamiento entre padre e hijo (vinculado en la reescritura de Saavedra al prometeísmo), el destino o el sueño. Asimismo, el dramaturgo romántico imita algunos de los aspectos más característicos del estilo calderoniano, como sus metáforas referidas a los cuatro elementos, el simbolismo, el uso de personajes alegóricos o la preferencia por el romance.
El desengaño en un sueño se constituye así como un homenaje a La vida es sueño en el que los principales rasgos temáticos y formales del clásico se reinterpretan desde una estética y una ideología románticas, adoptándose, por ejemplo, elementos fantásticos, recursos retóricos característicos de este movimiento (como la hipérbole, la exclamación retórica o el anacoluto) y, sobre todo, contraponiendo a la defensa calderoniana de la virtud el pesimismo existencial que caracterizó al espíritu romántico.
Conclusión
El desengaño en un sueño muestra la trascendencia que la obra de Calderón de la Barca adquirió en la primera mitad del siglo XIX, no únicamente en el ámbito de la teoría y la crítica literarias, sino también al insertarse en la producción dramática de la época. Gracias a El desengaño en un sueño podemos comprender mejor cómo se concibió y valoró el teatro de Calderón durante el Romanticismo, perspectiva que indudablemente ha influido en nuestra manera de leer y representar la obra de Calderón de la Barca en nuestros días.
Álvaro Ramos Ruiz
Comentó el 22/11/2024 a las 13:56:19
Estimada Laura, enhorabuena por el trabajo. Quería preguntarle si este análisis lo ha realizado con otras obras teatrales de temática similar para poder obtener resultados más amplios. Muchas gracias. Un saludo.
Laura Hernández González
Comentó el 22/11/2024 a las 14:05:58
Buenos días:
Muchas gracias por su pregunta. Hasta ahora he analizado alguna otra reescritura de obras de Calderón, pero siempre en el Siglo de oro. La verdad es que es la primera vez que me aventuro en el siglo XIX. Evidentemente, el estudio es susceptible de ampliarse y su sugerencia es muy acertada. Gracias de nuevo.
Un saludo.
Vanesa Ledesma Urruti
Comentó el 21/11/2024 a las 23:55:23
Gracias, Laura, por una comunicación tan amena e interesante. Llama la atención el término "desengaño" en el título de la obra del duque de Rivas, pues siendo un concepto típico del barroco, puede resultar un poco confuso en una obra que es mucho más fantástica o fantasiosa que la de Calderón. Por otro lado, ambas obras tratan el tema de la libertad de formas radicalmente distintas, pareciera que el duque de Rivas está preso de una idea protestante de la libertad (quizás me equivoque). ¿Podrías aclarar algo más al respecto? Gracias de nuevo.
Laura Hernández González
Comentó el 22/11/2024 a las 13:18:33
Buenos días:
Muchas gracias por el comentario. En efecto, el tratamiento de la libertad es absolutamente diferente en ambas obras. El duque de Rivas, como buen romántico radical, se rebela contra todos los aspectos del dogma católico, entre ellos el del libre albedrío que defendía Calderón en La vida es sueño. Creo que su postura, más que conectar con el protestantismo, se vincula con el concepto clásico de destino o fatum, desde una perspectiva pagana que también resultaba bastante revulsiva en su época. Gracias de nuevo y un saludo.
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