Enfoque
Comunicación y política han consolidado un estrecho vínculo a lo largo del siglo XXI. Pero saber comunicar no es simplemente una cuestión técnica útil para publicistas, periodistas y asesores. La producción y la difusión de los discursos son procesos cada vez más entrelazados. Por otro lado, conocer las técnicas de persuasión se ha convertido en un objetivo imprescindible para la defensa del derecho a la información y de la propia democracia. El avance de la tecnología no debe sino reforzar la responsabilidad social de quienes generan y difunden pensamiento. La eficacia con que se difunden los mensajes políticos e ideológicos no puede ir en detrimento de la ética.
